Una vez entró la moto en casa había que ver por donde empezar. Y para eso había que saber hacia donde se quería ir, decidir lo que me vale de la moto en su estado original y lo que no.
Viendo fotos y más fotos, videos... lo primero que saltaba a la vista era que con ese manillar no podía seguir, lo suyo eran unos buenos semimanillares. Así que simultáneamente al desmontaje y inicio del proceso de limpieza de la moto, iba buscando piezas que, como ya dije, no era una labor fácil, ni siquiera las originales no se encuentran facilmente en el mercado de segunda mano. Pero vamos con el desmontaje...
Al ser una moto de segunda mano con algunos años encima, pensar que pudieran transferírmela con el libro de usuario era casi ciencia ficción, (y así fué, no había manual de usuario) así que gracias al foro "Cafe Racer España" donde hay una sección dedicada a esta moto y gracias también a internet conseguí hacerme con el manual de taller de despiece de la Suzuki. Es una moto sencilla, pero aún así es bueno saber donde va cada cosa cuando lo más grande que tienes de la moto, una vez desmontada, cabe en una caja de zapatos.
Lo principal era limpiarla bien, despojarla de polvo y ver qué era realmente óxido y marcas de cal y qué era simple suciedad. Sólo después de eso empezaría con el desmontaje, habiendo tomado previamente abundantes fotos desde diferentes ángulos, lo cual me serviría de guía a la hora de montar de nuevo en caso de duda, para no tener que estar acudiendo constantemente a la ficha de despiece.
Tras el lavado inicial que se puede ver en la foto, quedaba claro que las llantas, los amortiguadores y los tubos de escape eran los que más habían sufrido el paso del tiempo. Así que había que empezar los cuidados en esas zonas. El tubo de escape, de todos modos, me preocupaba poco ya que había visto un kit para la Suzuki GN250, prima hermana de la TU250 ya que comparten chasis (aunque no subchasis) y motor, de dos tubos de escape en lugar del 2-1 que lleva ésta. Así que el tubo de escape iba a quedar desmontado y guardado, estuviera como estuviera, para usarlo el día de la ITV. Empecé, pues, con las llantas y los amortiguadores. Empezaba la era del
"rascamiento".

Tras visitar varios foros sobre restauración de motos antiguas, vi que la mejor manera de hacer saltar esa capa mate de los cromados era ni más ni menos que el producto que se usa para limpiar las vitrocerámicas. Eso, con un trapo de algodón ya hacía milagros, se llevaba toda la patina negra que se ve incrustada. Para picos de óxido más serios hubo que usar una lana
de metal muy fina y frotar con cuidado para no rallar el cromado. De todos modos, los resultados creo que fueron más que satisfactorios tanto en las llantas como en los amortiguadores, así como en los guardabarros. Hay que decir que las fotos de la moto después de lavada no le hacen demasiada justicia a la verdad. La moto estaba bastante mate por todas partes y las piezas que véis aquí, excepto la foto de la llanta delantera, son después de haberle dado durante bastantes horas al trapo, la lana de metal y al limpiavitrocerámicas.
Pero sin lugar a dudas, lo que lleva más tiempo y más entretenido resulta son los radios de las ruedas. Es muy aconsejable previamente a querer sacarle el brillo limpiar a fondo la rueda, especialmente la de atrás, a base de quitagrasas e incluso con gasoleo para quitarle los restos de grasa y suciedad que el agua y el jabón no se hayan llevado, o lo único que haréis será reapartir la porquería por la rueda en lugar de estar recuperándole el brillo. Como se ve, cualquiera puede hacerlo sin ser un profesional. Yo al menos era la primera vez que hacía esto.
Viendo fotos y más fotos, videos... lo primero que saltaba a la vista era que con ese manillar no podía seguir, lo suyo eran unos buenos semimanillares. Así que simultáneamente al desmontaje y inicio del proceso de limpieza de la moto, iba buscando piezas que, como ya dije, no era una labor fácil, ni siquiera las originales no se encuentran facilmente en el mercado de segunda mano. Pero vamos con el desmontaje...
Al ser una moto de segunda mano con algunos años encima, pensar que pudieran transferírmela con el libro de usuario era casi ciencia ficción, (y así fué, no había manual de usuario) así que gracias al foro "Cafe Racer España" donde hay una sección dedicada a esta moto y gracias también a internet conseguí hacerme con el manual de taller de despiece de la Suzuki. Es una moto sencilla, pero aún así es bueno saber donde va cada cosa cuando lo más grande que tienes de la moto, una vez desmontada, cabe en una caja de zapatos.

Tras el lavado inicial que se puede ver en la foto, quedaba claro que las llantas, los amortiguadores y los tubos de escape eran los que más habían sufrido el paso del tiempo. Así que había que empezar los cuidados en esas zonas. El tubo de escape, de todos modos, me preocupaba poco ya que había visto un kit para la Suzuki GN250, prima hermana de la TU250 ya que comparten chasis (aunque no subchasis) y motor, de dos tubos de escape en lugar del 2-1 que lleva ésta. Así que el tubo de escape iba a quedar desmontado y guardado, estuviera como estuviera, para usarlo el día de la ITV. Empecé, pues, con las llantas y los amortiguadores. Empezaba la era del



Tras visitar varios foros sobre restauración de motos antiguas, vi que la mejor manera de hacer saltar esa capa mate de los cromados era ni más ni menos que el producto que se usa para limpiar las vitrocerámicas. Eso, con un trapo de algodón ya hacía milagros, se llevaba toda la patina negra que se ve incrustada. Para picos de óxido más serios hubo que usar una lana

Pero sin lugar a dudas, lo que lleva más tiempo y más entretenido resulta son los radios de las ruedas. Es muy aconsejable previamente a querer sacarle el brillo limpiar a fondo la rueda, especialmente la de atrás, a base de quitagrasas e incluso con gasoleo para quitarle los restos de grasa y suciedad que el agua y el jabón no se hayan llevado, o lo único que haréis será reapartir la porquería por la rueda en lugar de estar recuperándole el brillo. Como se ve, cualquiera puede hacerlo sin ser un profesional. Yo al menos era la primera vez que hacía esto.